lunes, 1 de junio de 2015

EL PERDONADOR TE ESPERA


Salmo 32     

Experiencia de la dicha del perdón

Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado. 
Bienaventurado el hombre a quien Jehová no culpa de iniquidad, Y en cuyo espíritu no hay engaño. 
Mientras callé, se envejecieron mis huesos En mi gemir todo el día. 
Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano; Se volvió mi verdor en sequedades de verano. Selah 
Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado. Selah 
Por esto orará a ti todo santo en el tiempo en que puedas ser hallado; Ciertamente en la inundación de muchas aguas no llegarán éstas a él. 
Tú eres mi refugio; me guardarás de la angustia; Con cánticos de liberación me rodearás. Selah 
Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar; Sobre ti fijaré mis ojos. 
No seáis como el caballo, o como el mulo, sin entendimiento, Que han de ser sujetados con cabestro y con freno, Porque si no, no se acercan a ti. 
Muchos dolores habrá para el impío; Mas al que espera en Jehová, le rodea la misericordia. 
Alegraos en Jehová y gozaos, justos; Y cantad con júbilo todos vosotros los rectos de corazón. 

CONCLUSION:

Qué hermosa es la palabra del Señor. Ella nos enseña la verdad divina, y una de estas es que podemos ir a Dios directamente, sin intermediarios, y confesarle a él nuestros pecados, ofensas, errores y equivocaciones personales.

Por eso él es Dios, porque no hay otro que pueda comprendernos y perdonarnos. El ser humano no entiende esto y está presto a castigos y disciplinas a aquellos que se equivocan.

Qué bueno es tener un Dios perdonador que al confesar en oración nuestros pecados, el nos perdona con su amor y su bondad.

Acudamos a él, en la intimidad del lugar secreto de oración, y como hijo a Padre, expresarle nuestro pesar y nuestro amor.

Ofrenda a este ministerio de consejería y evangelístico con tarjeta de crédito:

ANTES DE CONFESAR

* No ponga nombre completo sino solo nombre o anónimo.
* No escriba detalles que comprometan su identidad social.
* Escriba como si le estuviera confesando a Dios y a los hermanos/as en la fe su pecado o debilidad.
* Dígale todo lo que siente a Dios.
* Pida su perdón y restauración.

Confesemos nuestros pecados y debilidades

Confesemos nuestros pecados y debilidades
y recibamos el perdón de Dios.

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** INGRESA CON TU FAMILIA AL REINO DE LOS CIELOS A TRAVES DE ESTA ORACION: **

Haz esta oración y sé salvo y sano espiritualmente:

Repite con nosotros:

Padre y Dios mío, vengo a ti, no puedo más, estoy tan cansado/a, me siento mal, tengo mil problemas, te necesito, ayúdame por favor, creo en tí, aunque no te vea o no te sienta, perdóname por mis pecados, me arrepiento por estar lejos de ti, te pido que me perdones, a través de tu Hijo Jesucristo, lo recibo a él en mi corazón, entra Jesús en mi, tu eres mi salvador, hazme una nueva persona, lléname de tu Espíritu Santo, de tu Palabra, de tu bendición, cámbiame, mejora mi vida, mi familia, mi economía, por favor te lo pido, ten piedad de mi oh Dios, yo te doy gracias, te alabo y te bendigo, y te daré toda la gloria, la honra y la alabanza. Amén.